27 de febrero de 2023.
El concreto autocompactable, conocido como CAC, es el resultado de una tecnología que ha logrado por primera vez, que una propiedad del concreto en estado fresco permita garantizar la correcta compactación y consolidación del material directamente en el elemento estructural.
Este material pertenece a la familia de los concretos de alto desempeño; se define como “aquel que tiene la propiedad de consolidarse bajo su propio peso sin necesidad de vibrado, aun en elementos estrechos y densamente armados”. Se “autocompacta” por sí solo, asegurando la continuidad del concreto endurecido.
Está diseñado para cumplir como Clase 1 o Clase 2 dependiendo de las especificaciones de cada proyecto. Típicamente tienen un alto volumen de pasta, menos agregado grueso y una alta relación arena-agregado grueso.
La fluidez y cohesión que presenta, permite inyectarlo en las cimbras para que llenen estas, desde abajo hacia arriba. Este procedimiento, en elementos de altura importante, evita la formación de burbujas de aire aprisionadas entre la pared de la cimbra, y la propia masa de concreto. En todo caso la formación de estas burbujas, utilizando el desmoldante adecuado, es inferior a los que se presentarían utilizando concreto convencional.
Sus principales usos son:
- En elementos de sección estrecha o densamente armados.
- Reestructuración de elementos principales, tales como columnas de concreto reforzado y trabes.
- En elementos donde la altura de caída es mayor a 2 m
- En revestimientos de estructuras metálicas.
Sus principales ventajas:
- Alta trabajabilidad y fluidez.
- Baja segregación y alta cohesión.
- Ahorro en costos de mano de obra, vibrado del concreto y nulas reparaciones por el acabado que deja.
- Rapidez en la ejecución de obras con mínimos desperdicios de concreto.
- Es un material adecuado para colocarlo mediante bombeo.
- Autonivelante.
- Homogeneidad en el concreto endurecido.
- Requiere menos supervisión.
- Reducción del ruido por la ausencia de vibradores.