BLOG
RECOMENDACIONES PARA CONCRETO HECHO EN OBRA
23 de enero de 2023.
En primer lugar, debe asegurarse que los materiales a utilizar (cemento, agua, grava, arena, aditivos) se encuentran en óptimas condiciones para su uso:
Como es bien sabido, no debe usarse cemento que contenga grumos que no puedan deshacerse con los dedos, ya que representa un inminente inicio de hidratación, y al utilizarlo, se corre el riesgo de que no cumpla con la resistencia esperada.
Los agregados (arena y grava) deberán estar limpios, libres de arcilla, madera, raíces u otro material o residuo vegetal o animal. En caso de estar sucios, deben lavarse y permitir secar el exceso de humedad. De preferencia utilizar arena y grava caliza densas, que darán más resistencia a los temblores. Evita el tezontle y otras piedras porosas. La arcilla, basura, salitre y aceite provocan baja resistencia y agrietamientos.
Dentro de lo posible deben evitarse el exceso de partículas planas y alargadas, ya que necesitan más agua que los agregados compactos, redondeados, y por consiguiente un mayor contenido de cemento para mantener la misma relación agua-cemento.
El agua que se va a usar, de igual manera debe ser limpia, libre de jabones, grasas, y aceites; generalmente el agua de la red, es apta para preparar el concreto.
En el caso de los aditivos, debe tenerse principal cuidado en su fecha de caducidad, evitarse la sobredosificación, ya que puede llegar a ser contraproducente, y de preferencia evitar aquellos que tengan exceso de cloruros, ya que éstos contribuyen a la corrosión del acero de refuerzo.
Segundo: las proporciones de los materiales deben respetarse para obtener la resistencia deseada. Para ello, existen guías o recomendaciones que los fabricantes de cemento realizan, para obtener las resistencias adecuadas, de acuerdo al elemento a colar.
Por ejemplo, el concreto de 100 kg/cm2 puede usarse en guarniciones, banquetas y firmes. El concreto de 150 kg/cm2 se utiliza en pisos, cadenas y castillos. Y el concreto de 200 – 250 kg/cm2 se recomienda en losas, trabes, zapatas y losas de cimentación.
El concreto se hace de una mezcla de ¾ partes de arena y grava y la otra cuarta parte de agua y cemento. (75% de arena y grava y 25% cemento y agua).
El uso de agua de mezclado en exceso, diluye la pasta, debilitando las cualidades del concreto. Por tal motivo, es importante que el cemento y el agua sean usados en las correctas proporciones para obtener los mejores resultados.